Los niños esperan sus regalos y muchas veces condicionados por la sociedad neoliberal que invita a consumir porque de otra manera el sistema no se sostiene. Así que suelen pedir juguetes o ropa cara de marca que han visto por la publicidad. Pero tú sabes que se divierten igual con algo muy sencillo y simple. Sabes también que muchos juguetes caros quedan rápidamente en el olvido.
Te sugiero que tú y tus niños intenten desconectarse del condicionamiento social y les regales juguetes y ropa buena, no necesariamente de marca conocida. Te saldrá mucho más barato y el efecto, al final, es el mismo. Tu amor no tiene que medirse por la cantidad de dinero que gastes en un regalo.
Y si sientes además el compromiso de regalar objetos a los adultos, ¿qué tal si los compras a artesanos o microempresarios? Tienen un valor hermoso lo que ha sido hecho con dedicación por las manos de alguien. Y estarás ayudando a personas que necesitan ingresos, especialmente para esta época. Total, las grandes multitiendas ya tienen buenas ganancias.
Independiente de tu creencia, es una época para darle mejor sentido al amor y a la paz.