Te tenía miedo
Me gusta siempre mirarte, especialmente al amanecer y al atardecer. Tus tornasolados colores, siempre en movimiento, son de vida y dan vida. El azul de tu mirada me traspasa el alma y me hace flotar en sueños. Sólo sueños, porque me das miedo. Siempre me has provocado respeto. Y hablando de sueños, anoche soñé que […]