Varias veces he escrito sobre la importancia de tener amigos. Ellos son necesarios para darnos esos pequeños momentos de alegría que constituyen a la larga una vida feliz. Es una palabra, eso sí, que abarca muy diversos grados de amistad, desde aquéllos que podemos considerar como amigos íntimos con quienes podemos confiar gran parte de nuestras vidas, hasta los que no pasan de ser realmente personas conocidas que vemos con cierta frecuencia. Me gustaría que el idioma español tuviera diferentes palabras para los distintos grados de amistad. Personalmente tengo muchos amigos, aunque los amigos cercanos e íntimos son relativamente pocos.
Los amigos también nos permiten tener oportunidades de negocios y nos ayudan a lograr nuestras metas. Mientras más amigos tengamos, más probabilidades de éxito y apoyo tendremos para nuestros proyectos. Nos auxilian también cuando debemos hacer algún trámite importante. No importa que un amigo ocupe un lugar sin mucha importancia en una empresa, pero él puede abrirnos camino por una vía informal que resulta ser generalmente mucho más exitosa que seguir los conductos regulares. Por muchos años trabajé en el Departamento de Estudios y Métodos de un importante banco comercial, cuyo lema era «Su Banco amigo». Pero la mejor publicidad que hizo fue una campaña que decía: «más importante que tener un Banco amigo es tener un amigo en el Banco». Debido a que por mi labor de servicio he conocido a miles de personas, casi siempre que debo hacer algún trámite en alguna repartición pública o empresa, alguien me facilita las cosas ocupándose personalmente de solucionar mis asuntos.
¿Cómo ganar amigos? Ante esta pregunta quizás a muchos les venga en mente el famoso libro de Dale Carnegie «Cómo ganar amigos e influir sobre las personas». Tras citar una enormidad de ejemplos y casos, finalmente el libro se puede resumir en unas tres páginas con las sugerencias prácticas para lograrlo, sugerencias que desde luego hemos dado muchas veces en esta publicación. Sin embargo, aquí me referiré a un punto de vista más moderno para conseguir amigos: el marketing relacional.
Segmenta tu mercado. No se trata de buscar amigos en cualquier parte. Debemos cuidar las vibraciones que nos rodean, el tipo de pensamientos y emociones que queremos cultivar. Los amigos deben compartir algunos de nuestros intereses y tener algunos ideales comunes. De modo que es necesario buscarlos en los grupos humanos que gustamos o nos gustaría frecuentar. Participar de cursos, conferencias o actividades relacionadas con nuestros intereses nos permite entrar en contacto con personas que pueden ser nuestros futuros amigos.
Genera prospectos. Son personas identificadas de alguna manera contigo. Ofrece a los desconocidos y conocidos candidatos a amigos algo que ellos deseen y que tú puedes darles. Puede ser una asesoría en algo que sabes, un video, artículos que has escrito o compartir experiencias. Lo que puedes compartir depende de tu actividad. Ten una actitud de servicio desinteresado. Recibirás como recompensa la alegría de compartir y ser útil.
Vende. Utiliza tu creatividad y buena voluntad para ofrecer algo ojalá cada semana (me refiero aquí a algo gratuito). Una nueva idea, una conversación, una nueva experiencia compartida, un artículo, un recorte del diario que pienses les puede interesar, un dato de internet relacionado con sus intereses, etc.
Fideliza a tus amigos. Tal como los buenos clientes de una empresa, a los amigos hay que hacerles un seguimiento. Llámalos o envíales un email con regularidad, interésate auténticamente por ellos. Sorpréndelos siempre con algún servicio o al menos con escucharlos atentamente. Exprésales tu amistad en cualquier momento, no esperes su aniversario o la navidad o el fin de año para saludarles. Sorpréndeles enviándoles una nota o haciéndoles una llamada telefónica la próxima semana.
La felicidad y el éxito en tu vida se basan en qué tan bueno eres para generar amigos, qué tan eficiente eres para transformar desconocidos en conocidos, y algunos conocidos en amigos, y unos pocos amigos, en buenos amigos. Cualquier negocio en la vida ocurre entre personas. Conviene relacionarse con la gente y mantener la comunicación.
Tengo esta técnica de éxito seguro para ti: da más de lo que la gente quiere y da menos de lo que la gente no quiere.
Aprende a persuadir con éxito
Adquiere las habilidades necesarias para persuadir a otros con nuestro curso de persuasión por internet. Aprende cómo influir en los demás, cómo comunicar tus ideas con éxito y cómo lograr tus objetivos de forma eficiente.