EL Arqueólogo de la Universidad de Tel Aviv, profesor de origen Judío Israel Filkenstein, afirma qué hay varios personajes del Antiguo Testamento de la Biblia, que nunca existieron, como son: Moisés, Abraham, Isaac, Jacob, Noé y el resto de los patriarcas antiguos.
Pues según el historiador Judío Neil Asher “la ciencia tenía que desvelar la verdad y completar la historia del pueblo”.
“No hay ni una sola referencia histórica, más allá del antiguo testamento y de otros libros religiosos que mencionen la existencia de un tal Moisés”.
De este modo ahora se sabe que los personajes históricos reales aparecieron sólo hasta tiempos del Rey David, en el año 1000 a.c. Y los personajes anteriores que surgieron en el año 2100 a.c. fueron en su mayoría héroes nacionales falsos creados con el fin de dar cohesión a un pueblo totalmente dividido, tanto geográficamente como en costumbres, como lo fue Israel y Juda.
Y no sólo eso, sino que no hay evidencias de la existencia de israelitas antiguos en Egipto.
La situación de Canaán en la supuesta fecha de la conquista, entre 1230 y 1220 a.c. es totalmente distinta a los que la biblia alude, ya que la ciudad de Jericó ni siquiera existía en el siglo XIII a.c. De este modo al menos son cuatro argumentos estrictamente arqueológicos los que desmantelan la mentira sobre Moisés, la tabla de los Mandamientos y el Éxodo judío:
1) Tras 200 años de investigaciones en el terreno de la egiptología no se encontró ninguna referencia escrita en Egipto que se refiera a los hebreos como un pueblo esclavo que después se liberó.
2) Falsas cronologías: La estela de Merneptah, la única mención qué hay de un Israel antiguo, remite al año 1210 y no al 1430-1420 que es la fecha atribuida con el antiguo testamento, para la gran epopeya de los hebreos, hay 200 años de diferencia entre una fecha y la otra.
3) La arqueología no encontró vestigio alguno de hebreos que hayan estado en la península del Sinaí y mucho menos en el monte Sinaí. Lo que significa que ningún dios le dio a ninguna persona una tabla de mandamientos escritos en piedra.
Y 4) Las motivaciones políticas de Judea en el siglo VII a.c. explican la necesidad de crear la mentira del Éxodo de Moisés. Esto para reunir del norte (Israel) con el reino del sur (Judea), el Rey Josefas necesitaba ayuda contra el invasor.
Tomando en cuenta estos cuatro incisos, tenemos que la única referencia a Israel como un grupo humano residente ya en Canaán es la estela (inscripción en piedra) del faraón MERNEPTAH. El faraón destruyó por completo el pueblo de Canaán en la campaña bélica de 1210 llevada a cabo contra los cananeos por no pagar sus impuestos. Tampoco hay evidencias sobre israelitas en Egipto. No hay inscripciones funerarias ni en papiros. No hay inscripciones monumentales sobre muros de templos que indiquen que hubo israelitas antiguos. La ciudad de Jericó como lo indica la Biblia (siglo XIII a.c.) no existió en ese momento, fue 200 años después cuando comenzó a crecer muy lentamente y 700 años después si llegó a ser una gran ciudad. 200 años antes del siglo XIII a.c. y 200 años después del mismo siglo no hubo construcción alguna.
Otra evidencia de la manipulación del antiguo testamento es que está plagado de relatos que habla de camellos que eran usados como medio de transporte, desde el tiempo de Abraham en adelante. Lo cierto es que en el siglo XIII a.c. los camellos ni siquiera se habían domesticado. Hay otro problema de sentido común, como la imposibilidad de cruzar entre 2.5 y 3 millones de personas en un día el Mar Rojo y luego el desierto.
Los 10 mandamientos no tienen validez, ni son universales, ni son aplicables a cualquier época de la historia, pues fueron escritos en el siglo VII a.c. por el escriba en turno en Judea -en la época del Rey Joseias- por motivos exclusivamente políticos y no religiosos. Moisés es mencionado como personaje en todo el nuevo testamento, desde los evangelios hasta el Apocalipsis. Las escrituras del nuevo testamento estuvieron falseadas toda su vida, incluso Jesús. Algunos versículos del Nuevo Testamento:
– Juan 3:14 “y como Moisés levantó la serpiente en el desierto; así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado”.
– Mateo 17:3 “se les aparecieron Moisés y Elías conversando con Jesús”.
– Marcos 9:4 “entonces se les aparecieron Moisés y Elías hablando con Jesús “.
– Romanos 9:15 “Moisés dice: tendré misericordia del que yo tenga misericordia”.
– Apocalipsis 15:3 “ y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios”.
La mayoría de los cristianos dirán que todo lo anterior no es cierto ya que a Moisés se le menciona como persona real, pero ya es tiempo de eliminar estas mentiras inventadas desde hace más de 2600 años.
Las técnicas arqueológicas modernas son capaces de hallar en todo el mundo huellas incluso las de escasísimos restos dejados por cazadores, recolectores y pastores nómadas. Así que el origen de los judíos está en otro lugar geográfico, en realidad son Jazaros Ashquenazis con ADN turco-mongol y por lo mismo no son originarios de la tierra actual de Israel sino que provienen de la región de Jazara, que en el año 652-1016 d.c. incluía parte de la Rusia moderna, Ucrania y una pequeña porción de lo que ahora es Kazajistán, en el Mar Caspio y el Mar Muerto.
Fuentes:
Israel Finkelstein arqueólogo
Neil Asher Historiador