2015

Exposición Orozco, Rivera y Siqueiros

Ese año se trae a Chile la exposición pendiente de los grandes muralistas mexicanos que, originalmente, se iba a presentar en septiembre de 1973.

Cuarenta y dos años después, las obras pertenecientes a la Colección del Museo de Arte Carrillo Gil de México vuelven a embellecer las mismas paredes del museo que un día ya las acogió y que aún conservan las marcas de las balas que en septiembre del 73 también arremetieron contra la catedral artística santiaguina.

En una de las salas de la muestra, titulada «La exposición pendiente», cuatro obras cubistas de Diego Rivera dan cuenta de la etapa más universal y vanguardista del destacado muralista mexicano, que contrasta con la lúgubre serie «La revolución de los horrores», de José Clemente Orozco.

En otro de los espacios expositivos se pueden ver algunas pinturas abstractas y bocetos de murales que realizó David Alfaro Siqueiros, quien influyó enormemente en la tradición muralista chilena.

Además de las obras, hay vídeos y documentación de la tensa comunicación ente el gobierno de México y Chile para recuperar las creaciones artísticas y que lleguen sin daños de vuelta a México. Hay cartas, recortes de prensa (que ya he visto en 1973) mencionado la situación. No la pude ver en 1973 porque la dictadura cívico-militar no permitió la exhibición. ¡Pero ahora sí está aquí!

Veo un documental que se exhibe en el lugar con las escenas que contemplo con mis propios ojos ese septiembre de 1973 ya que mi lugar de trabajo está frente a La Moneda, separado sólo por la Plaza de la Constitución.

Es un retorno de 42 años vividos en un instante. En una nueva etapa de mi vida. Ciclos que se cierran. El país es muy diferente, el mundo ha cambiado, la gente cambia… sólo las sólidas murallas del Museo y sus estatuas de la entrada permanecen aún sin cambios, como un referente para enlazar experiencias y quizá, hacer renacer esperanzas de un futuro mejor.

Visitando la exposición con Carolina
(Confidencial, porque dicen que no está permitido tomar fotos.)

Carmina Burana

Feliz después de ver una vez más la presentación de la obra «Carmina Burana» con la Orquesta Sinfónica de Chile y el Coro Sinfónico. Feliz de ver dirigiendo a una talentosa mujer. La música le corre por las venas.

El coro fue dirigido por Juan Pablo Villarroel, el mismo que estuvo dirigiendo el coro de la CEPAL para nuestros eventos de Arte por la Paz Mundial.

Al término de la presentación, un grato saludo con la Directora Alejandra Urrutia, una persona sencilla y encantadora.

(Un espejo nos delata que estamos abrazados.¿ lo ves?)

Vivir el momento

A veces la vida se da completando ciclos. Y creo que en el propósito de uno está el que el futuro se renueve y sea mucho mejor que el pasado.

Cada vez me doy más cuenta que hay que vivir el momento. Mañana mismo o más rato tal vez, ya no puedas contar con ciertas personas o ciertas circunstancias.

Con mi hermana creo que puedo contar, así como ella conmigo.

Sobre el cuento de hadas-ballet Cascanueces

Me gusta el ingenio y creatividad de Tchaikovsky para presentar diversas melodías folclóricas de muy distintos lugares del planeta, permitiendo coreografías variadas en sus bailes, vestuarios y ritmos.

La danza del Hada del Azúcar es siempre bella. El instrumento llamado celesta contribuye a darle esa magia celestial en una bailarina que parece flotar en el aire.

La obra muestra cómo la mente puede dejarse llevar por la imaginación y construir sueños hermosos que alimentan el alma, siempre que tengamos presente que son eso… sueños.

Este es uno de los pocos ballets que tiene como personaje central y destacado a un hombre. El papel de Drosselmeyer permite un gran lucimiento de un artista. Esta vez que lo vi, eso sí, se enredó en su capa celeste y tuvo que hacer un movimiento extra para liberarse de ella.

Tanta variación melódica y distintas coreografías, creo que permite que toda persona lo disfrute. Si no le atrae una, le gustará otra.

En mi país, que tiene pocos recursos destinados a la cultura, se presenta con un elenco reducido. Aún así, la ingeniosa puesta en escena, la orquesta y la destreza de los bailarines hace olvidar por momentos que en otros países se presenta este ballet con un enorme elenco y muchos recursos coreográficos.

Aún sigo dando luz

Este año visito uno de los edifcios donde hace 33 años planifiqué la instalación eléctrica. Aún cuelgan mis lámparas.

Todo cerca

¡Trámites! Ir a la Notaría, ir al Banco, ir al Correo, ir a comprar algo para el almuerzo… todo a pocos pasos de distancia, caminando al aire puro, todo se hace en minutos, con gente amable que te conoce, con cordialidad y humanidad. Y si hubiera una emergencia. la ambulancia llega en cinco minutos y los bomberos en tres. Hay tiempo para conversar, para conocer a los vecinos, para apoyarse…

Son algunas de las delicias de vivir en un pueblo campestre, rodeado de cerros y naturaleza (aunque algunos echen abajo árboles y los nidos de pajaritos que hay en ellos). Nada es perfecto, pero feliz de estar aparte del estrés y consumismo de la gran metrópoli. Aquí no es necesario lucir ropa de marca.

Soy amante de las tertulias

Buen viaje querido amigo Tito Barrera. Extrañaré mucho nuestras conversaciones, verdaderas tertulias. Extrañaré tu amistad sincera y sencilla. Ya no estarán nuestras charlas de lo contingente y de lo trascendente. Eres mi último amigo aquí donde vivo… Ya nada será igual por aquí.

Aprecio mucho tus comentarios y aportes. Escríbeme. ¿Hay algo mal? ¡Avísame!

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